No espero hacer ese viaje es un libro de fantasmas, cartas olvidadas, viajes truncados y vidas destruidas por la guerra y el fanatismo. Un homenaje a cuatro espíritus libres que con sus vidas y obras, sus palabras y grabados, sus acciones y andanzas por un mundo incendiado dieron ejemplo de cómo enfrentar una época de locura. Es, además, una reflexión sobre el presente, en el que estamos entrando en otra época de locura que tiene muchas similitudes con la que vivieron los protagonistas y en la que la resistencia humanista adquiere una importancia inusitada, coyuntural.